Exprimir el rendimiento
de aquellos que pueden dar más
En Euskadi, se calcula que entre 7.000 y 16.000 estudiantes –
entre un 2 y un 5% del total- pertenecen al colectivo de alumnos con alta
capacidad.
No obstante, las cifras hablan de sólo unos 200 jóvenes
detectados. Se trata de un grupo con necesidades propias y que durante décadas
han sido “los grandes desconocidos y olvidados en el sistema educativo”,
explica Begoña Suárez, presidenta de Aupatuz, asociación que agrupa a un
centenar de familias vascas que trabajan en la defensa de los derechos de estos
alumnos.
Esta entidad pertenece a una plataforma que reivindica que se
cumpla la anterior LOE, y ahora la Lomce; ambas obligan a dotar de recursos a
los centros escolares, a realizar valoraciones tempranas y a desarrollar por
ley autonómica los protocolos y medidas que garanticen el derecho a un apoyo
especifico que ambas leyes establecen para el alumnado las recomendaciones de
expertos internacionales y de la unión Europea.
“Reclamamos este apoyo por que el profesorado no domina el tema,
no tienen formación en ellos. Desconocen que no es lo mismo un alumno con un
cociente intelectual de 130 que otro que tenga 180”, recala la portavoz de
Aupatuz. “en los medios de comunicación normalmente salen chavales con
cocientes muy elevados, que hacen cosas muy fuera de los común, por eso llegan
a ser noticia. Estos chavales son extraordinarios, pero representan solo el
0.01% de la población y su alta capacidad es tan evidente que no ofrece lugar a
dudas. Quien desconoce el tema identifica la alta capacidad con este perfil.
Por eso muchos profesores dicen que nunca han tenido un alumno así en el aula,
o los padres niegan que su hijo pueda serlo”, insiste Suárez.
Se trata de niños que aprenden de manera diferente, más
rápida, pero también distinta. Si no son detectados y no se les orienta
debidamente, adaptando los materiales a su manera de aprender
, pueden acabar abocados al fracaso escolar. De hecho, se
calcula que le sucede en un 60% de estos casos durante la ESO, entendiendo como
fracaso escolar rendir por debajo de la capacidad de cada uno.”Podrían ser
brillantes y aportar a la sociedad mucha creatividad y pensamiento si se
respeta su naturaleza y no nos empeñamos en que encajen en una sistema
homogéneo de enseñanza”, subraya.
El miedo a reconocerlo
En este sentido, tampoco ayuda el temor que sienten muchas da
familias a reconocer la alta capacidad de sus hijos por miedo a que sean
etiquetados, a que se les exija demasiado en el centro por su condición o a que
los compañeros se burlen de ellos. “Por eso normalmente solo se detecta la alta
capacidad cuando ha surgido un problema, no antes”, advierte, que desde su
comienzo ha colaborado con los centros escolares y la Administración para hacer
visibles esta realidad a través de acciones como conferencias, boletines y una página
web donde aportan información para familias y profesorado.
“Poco a poco, hemos pasado de una situación en la que las
familias se nos hacía sentir `culpables ‘de cómo eran nuestros hijos, acrecentando
así la sensación de abandono absoluto
del sistema hacia sus necesidades, a la aceptación de la existencia de este
colectivo. Este paso ha sido muy importante, pero hay que seguir avanzando”,
recala Suárez. ¿Cuáles son sus frentes? La formación del profesorado, dotación
de los recursos necesarios y flexibilización del sistema educativo. También la
implantación de nuevas metodologías “que permitan atender a la diversidad de
maneras de aprender que hay en un aula, la alta capacidad entre otras, para que
la escuela inclusiva sea una realidad, y no solo una filosofía. Y para que las
familias vayan perdiendo ese miedo y confíen en que la peculiaridad de sus
hijos va a estar bien atendida y orientada”.
Sin desarrollo
legislativo
Son demandas todas ellas recogidas en la anterior ley
estatal, que ya contemplaba la necesidad de una atención especial.”El problema
es masa nivel autonómico, porque no hay desarrollo legislativo. La Ley que hay es de cuando las altas
capacidades estaban dentro de las `necesidades educativas especiales´. Con la
Lomce se les incluye en un nuevo grupo, el de `alumnado con necesidades de
apoyo especifico´, dejando las primeras para casos con mayor necesidad de
atención. Pero como no se ha desarrollado la Ley a nivel autonómico para el nuevo
grupo, nos hemos quedado en un limbo… Para unas cosas se aplica la antigua,
`necesidades educativas especiales´ .Con la Lomce se les incluye en un nuevo
grupo, el de `alumnado con necesidades de apoyo especifico´, dejando las
primeras para casos con mayor necesidad de atención. Pero como no se ha
desarrollado la Ley a nivel autonómico para el nuevo grupo, nos hemos quedado
en un limbo… Para unas cosas se aplica la antigua, pero para la dotación de
recursos por ejemplo, no se aplica nada porque no hay cobertura legal”, explica
la presidenta de esta entidad.
COMO SACAR EL MÁXIMO
PARTIDO EN CLASE
§ Necesitan métodos de trabajo que se adecuen
a su forma de aprender y una estimulación intelectual apropiada para evitar el
aburrimiento y la desmotivación.
§ Se trata se niños especialmente
sensibles. Una detección temprana permite a las familias y al profesorado
entender determinados comportamientos comunes en estos niños, orientar mejor su
educación y atender correctamente su desarrollo emocional.
§ Emplear en el aula formas de trabajo
que permitan el desarrollo del talento no solo les beneficia a ellos, sino también
al resto de sus compañeros, pues sirve de estimulo colectivo, evita la
frustración y favorece la convivencia.
§ Se necesitan programas específicos ya
que un alumno que aprende con mayor rapidez y facilidad, en numerosas ocasiones
no necesita esforzarse para cumplir los objetivos académicos generales, por lo
que no desarrolla a su debido momento los hábitos de estudio, organización,
esfuerzo y disciplina necesarios para el optimo desarrollo académico.
§ La ausencia de medidas académicas
adecuadas y/o la falta de integración entre sus compañeros pueden originar en
ocasiones comportamientos no deseados, falta de atención en el aula, ansiedad,
baja autoestima e incluso depresión.
§ La alta capacidad para aprender no
significa saberlo todo, significa que el alumno puede estar preparado para
enfrentarse a contenidos más complejos que los establecidos en el currículo correspondiente
a su curso.
En cada etapa… un apoyo especifico
Cuando se
detecta un caso de un niño con alta capacidad en Educación Infantil, los
expertos recomiendan realizar adaptaciones informales, como el enriquecimiento
de las lecturas y de la escritura; creación o adaptación de los rincones de
trabajo para el enriquecimiento de contenidos con diferentes libros,
aplicaciones informáticas, juegos de ingenio, materiales adecuados a su
capacidad e intereses… Todo ello de modo flexible, en un clima que propicie la
curiosidad y la creatividad y evite la repetición de tareas. En casos
excepcionales se podría realizar una aceleración o adelanto de curso.
En el caso
de Primaria y Secundaria, existe una gran variedad de respuestas educativas, en
atención a la gran heterogeneidad de este colectivo, en algunos casos es aconsejable
la combinación de varias de ellas. La aceleración consiste en adelantarle uno o
varios cursos para ofrecerle un contexto más apropiado a sus capacidades, nivel
y ritmo de aprendizaje. En segundo lugar, el agrupamiento de estos alumnos
permite proporcionarles programas individualizados con ampliación de contenido académico
ordinario o de forma extracurricular fuera de este horario, mediante sistemas
de tutorías o para un grupo dirigidos por un especialista que no tiene porqué
estar directamente ligado al centro escolar.
Como regla
general los expertos recomiendan que la familia acuda a un profesional experto
en altas capacidades que le oriente en la educación de su hijo y le ofrezca
ciertas pautas de orden social, emocional y académico. Es muy importante que exista
una relación fluida entre todos los implicados en la educación del niño.
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