martes, 29 de octubre de 2013

La "Ley Wert"



     
     País Vasco

"La Ley Wert” perjudica a la FP de Euskadi y a la economía vasca”

Jorge Arévalo, viceconsejero de Formación Profesional del Gobierno vasco
Una Formación Profesional fuerte como pilar de las empresas vascas y como  una apuesta de futuro. Es la FP que el vicenconsejero Jorge Arévalo transmite con pasión ante amenaza de la ley Wert.
Pregunta. ¿A Euskadi le sobran graduados  universitarios y le faltan de FP?
Respuesta. No. Van por vías diferentes, no pueden confrontar; yo animaría a que se ajuntaran. En algunos sectores sería bueno hacer una FP y posteriormente una carrera si el estudiante lo desea. FP más universidad, no universidad y luego FP.
P. Hay quien está haciendo el camino de vuelta. ¿Les anima la vuelta al FP o a probar o buscar trabajo en el extranjero?
R. Lo importante es la orientación. Qué va a estudiar y si eso tiene recorrido en empleabilidad y en conocimientos. Si tiene claro lo que tiene que hacer, es lo que tiene que hacer y después ver cómo ubicarlo en su vida. Pero si no lo tiene claro, recomiendo hacer primero un FP, luego puede hacer una carrera o trabajar.
P. ¿Tiende esa orientación más a la universidad?
R. Sí, peo por cultura, por tender al nivel de conocimientos mayor. Es preferible que pase de menos a más que de más a menos. Supone alargar un tiempo la etapa de formación, pero en este contexto no es un problema.
P. ¿No es deseable que se vuelva a la FP?
R. Es bueno porque aumentamos en alumnos muy preparada. Desde luego, antes de que se vayan al extranjero, que vengan a la FP, que necesitamos gente en poco tiempo y no la tenemos.
P. ¿Cuánto tarda un FP en lograr trabajo respecto a un titulado universitario?
R. La colocación es similar, en torno a un 65 o 70%. En FP tardan seis meses en encontrar trabajo, antes de la crisis tardaban dos. Pero hay que decir que no todos los títulos de FP tienen la misma empleabilidad. Los de  industrial o los relacionados con el sector se colocan rápido y los puestos están mejor enumerados. En edificación, donde nadie entra por la crisis, tenemos solicitudes de empresas para alumnos que no tenemos, y eso que para 2018 necesitamos rehabilitar miles de viviendas.
P. ¿Qué títulos no se colocan tan bien?
R. Educación infantil o actividades físico-deportivas, por ejemplo. Ves los que se pre matriculan y piensas que no hay que sacar tantas plazas. Hay que buscar una solución.
P. Los ámbitos con más dificultades están precisamente muy feminizados. ¿Se están planteando medidas?
R. Sí, este Gobierno y los anteriores, Es un problema complicadísimo. En la FP industrial no está costando una enormidad introducir chicas. En fabricación mecánica, por ejemplo. El problema no lo tenemos tanto en la chica, sino en la familia de ella. La gente sigue pensando en buzos azules, en pesos… Que no, que esto ha evolucionado, hay equipamientos avanzados, todo informatizado, los talleres están limpios… no tiene nada que ver. No se dan cuenta de que esos chicos y chicas pueden disfrutar, que hay trabajos muy creativos. Eso tenía que estar superado, pero nos está costando.
P. Las empresas se quejan de que no se forma suficiente…
R. Y siempre se van a quejar. Cada empresa tiene su problemática, siempre habrá alguna que te diga que falta un tipo de preparación. Nosotros tenemos que asegurar que el 80% de lo que necesita la empresa lo vamos a preparar. Lo restante lo dan los cursos de especialización. Vamos a ampliar el programa de formación de alternancia Hezibi, con novedades. Hezibi es bueno, dura un año en el que el alumno se forma se forma en el centro y la empresa con un contrato. Hay empresas a las que se les queda corto, así que vamos a dar otra opción, de dos o tres años. La clave es que las empresas, para ser competitivas, necesitan trabajadores de gran nivel de  especialización. Sin él no serían competitivas.
P. Ante la deslocalización de las empresas, ¿Euskadi puede seguir siendo país industrial?
R. Tiene que serlo. U optamos por un modelo de Eurovegas, en el que poca gente gana mucho y muchos ganan poco, o por un modelo más Silicon Valley, con un producto avanzado y complejo, con mando de obra barata de grandes talleres, sino a buenos talleres con productos propios. Hay que lograr que los alemanes o EEUU nos contraten.
P. Eso nos lleva a un problema: ¿qué pasa con el inglés?
R. Sí, con el inglés tenemos un problema. No se oferta mucho y queremos seguir potenciando el plurilingüismo, pero no tenemos profesores suficientes que sepan inglés, ¡ni alumnos que lo dominen para seguir una clase técnica en ese idioma! El alumnado de FP trae muy flojos los idiomas, es la media general del sistema educativo. Los verbos los tienen que traer aprendidos, en FP no les pueden explicar gramática.
P. Siempre se puede establecer un sistema un sistema de libre elección en el que enseñar inglés.
R. Estoy de acuerdo, pero chocaríamos con Madrid, porque no permite cambiar módulos. Yo lo hubiera hecho.
P. Vamos entonces con Madrid. ¿Qué sería de Euskadi u su FP con la LOMCE?
R. Es un despropósito. Busca reducir el abandono escolar, pero solo lo puedes hacer con políticas educativas o maquilladas. Han optado por dirigir al alumno a una FP básica para mantenerlo en el sistema, con opción a saltar a la FP de grado medio. Pero en las empresas vascas piden gente con mayor preparación. Gente que llegue de Secundaria o Bachiller. Si se pasa a FP a gente sin formación, cumplen la función social pero se cargan la FP.
P. Sería convertir la FP en los Programas de Cualificación Profesional  (PCPI) que existen hoy.
R. Ahí estamos. A nosotros nos hacen polvo, perdemos competitividad.
P. Entonces no solo se hundiría la FP, sino también las empresas y la economía.
R. Sería una merma enorme en la economía vasca y, a medio plazo, de la c competitividad de un país. No podemos admitirlo.
P. ¿Cómo van a hacer para neutralizar?

R. No se ha aprobado y no perdemos la moral, Y de <IR></IR> aprobar una ley a implantarla hay un  mundo; si el sector no quiere, no funciona. Además, hay vías para sustituir lo que la LOMCE no nos cobra.

lunes, 28 de octubre de 2013

Aumenta la demanda de FP en Euskadi






Aumenta la demanda de Formación Profesional en Euskadi


El número de matriculaciones se ha incrementado un 4,56% este año. Dos tercios de los empleos requieren un título de FP.

Un total de 37.259 personas, un 4,56% más que el año pasado, se han matriculado este curso en alguno de los 107 ciclos de las 23 familias de Formación Profesional que se ofertan en el País Vasco. La cifra revela la apuesta de la población por una formación con salidas laborales o como medio para la reorientación de la carrera profesional.

La Formación Profesional es también una apuesta estratégica del Gobierno de Urkullu. Desde el inicio de la legislatura, el Ejecutivo autónomo ha avanzado su intención de reforzar esta ínea como medida para incrementar las tasas de empleo.

Según datos del Gobierno vasco, el 65% de los puestos de trabajo de las empresas vascas requieren un título de Formación Profesional y desde el Ejecutivo autónomo se ha avanzado su interés por mejorar la base formativa de estas plantillas y, con ello, la competitividad de las empresas y el crecimiento de la economía.

Las 23 familias de  Formación Profesional  comprenden un amplio abanico de sectores. 

La Agenda Estratégica FP Euskadi 1025, presentada el pasado mes de junio, establece los puntos que se deben mejorar para reinventar la Formación Profesional vasca. Además de un nuevo marco normativo, el documento hace hincapié en la necesidad de estrechar aún más la ya histórica relación entre los centros formativos y la empresa, priorizando el ámbito de la innovación aplicada. También se alude a la necesidad de aumentar la capacidad de adaptación a los cambios y necesidades del sistema productivo y establecer nuevos modelos de aprendizaje con los que se puedan conseguir nuevas competencias.

Trabajar y estudiar

Es destacable el impulso al emprendizaje que quiere llevar a cabo el Gobierno Vasco, fomentando la cultura emprendedora en los centros educativos, así como la orientación hacia la internacionalización de la FP. Todo ello con el objetivo de aumentar la inserción laboral.

Para ello, se mantendrán los programas de formación en alternancia como Hezibi. Esta iniciativa contempla la formación de dos formas: en el centro formativo y en el lugar de trabajo.
 Está dirigido a alumnado entre 16 y 30 años inscrito en Lanbide al que se realiza un contrato laboral para la formación y el aprendizaje. El viceconsejero de FP, Jorge Arévalo, anunció la semana pasada su intención de ampliar el modelo en alternancia a determinados sectores para responder a las demandas de las empresas.

Entre las medidas que reforzarán esta formación práctica destaca el programa Lehen Aukera, que comenzará en 2014. A través de esta iniciativa, durante tres meses, 600 alumnos de FP harán prácticas en empresas vascas para mejorar su capacitación y poder especializarse. A cambio, recibirán una compensación de 1.500 euros.

jueves, 24 de octubre de 2013

Jóvenes vascos de FP estudian y trabajan a la vez




232 jóvenes vascos de FP estudian y trabajan con un contrato de un año

LA CRISIS IMPIDE QUE MUCHAS EMPRESAS PUEDAN ACOGERSE AL
PROGRAMA HEZIBI

IDOIA ALONSO - Martes, 22 de Octubre de 2013

232 jóvenes vascos de FP estudian y trabajan con un contrato de un año (J.M.M.)


BILBAO. La formación en alternancia empieza a echar raíces en Euskadi. Este curso, 232 alumnos de Formación Profesional (FP) compaginan sus estudios en el instituto con el trabajo remunerado en una empresa, el doble que el curso pasado. La esencia del programa Hezibi descansa sobre un contrato para la formación y el aprendizaje de un año de duración que beneficia tanto a empresas como a estudiantes. La empresa, en cierto modo, logra un futuro trabajador con formación a la carta, al estilo de las Escuelas de Aprendices promovidas por las grandes empresas del siglo pasado, como Altos Hornos de Vizcaya, Euskalduna o Babcock & Wilcox. Por su parte, el estudiante adquiere una profunda formación práctica en un entorno profesional real con todo un año por delante para que le conozcan dentro de la organización, lo cual eleva sus posibilidades para acceder a un contrato después de las prácticas.

Óscar Amaro, profesor y responsable de Hezibi en el Instituto Elorrieta Erreka Mari de San Inazio, afirma que el nivel de inserción laboral de las personas que han participado en esta modalidad formativa del es del 100%, "todas se han quedado trabajando en la empresa en la que han hecho las prácticas". De alguna forma, apunta Amaro, este programa "es ideal para la formación especializada de futuros trabajadores de una empresa ya que las empresas pueden amoldar la formación a su antojo y necesidades de producción concretas".

Pese al gran interés que ha despertado Hezibi dentro del tejido económico vasco, su alcance es limitado ya que los institutos están encontrando dificultades a la hora de captar empresas debido a la crisis económica. "Hay empresas que están en ERE y otras despidiendo a sus trabajadores por lo que no se vería bien, ni es posible, la incorporación de nuevos trabajadores siquiera con un contrato en formación", afirma Amaro. Además, y a diferencia de otro tipo de FP duales que se están implantando en el resto del Estado, en Euskadi es la empresa la que asume el coste del contrato.

No obstante el Gobierno vasco ofrece una serie de incentivos. Las empresas se benefician de una reducción del 100% de las cuotas empresariales a la Seguridad Social y del 75% para aquellas con una plantilla superior a 250 personas. Además, la retribución del trabajador se fija en proporción al tiempo del trabajo efectivo, según convenio, nunca inferior al salario mínimo interprofesional. "Como empresa compensa", asegura Ángel Monviela, responsable de Recursos Humanos de Decoletaje y Fijación, una empresa de Arrigorriaga en la que trabajan 48 personas y se dedica a la fabricación en serie por arranque de viruta partiendo de barra. Según Monviela, tomar parte en Hezibi "es una inversión muy rentable porque al final el coste laboral es relativamente bajo". Evidentemente, añade, "el gasto es superior al de las prácticas normales donde el coste por estudiante es cero o lo que la empresa quiera darle para desplazamiento o dietas". En cierta manera, explica, Hezibi está orientado a compañías que "crean que van a aumentar la plantilla porque es una manera muy económica de tener por un año a un trabajador en formación, porque a efectos prácticos el estudiante es un trabajador más, es una persona productiva prácticamente desde el primer día". Además, cuando se acaba el contrato Hezibi "puedes hacerle un contrato en prácticas", comenta Amaro para quien una de las mejores cosas del programa es la criba previa que hace el centro. "No te mandan a cualquiera", dice.

 En este sentido, el profesor del Instituto Elorrieta Erreka Mari explica que "en principio no es un programa dirigido a todos los alumnos sino a aquellos que no tengan dificultades en superar los módulos y tengan ciertas cualidades personales, ya que a los participantes se les exige un doble esfuerzo". Antes de la crisis, en un contexto en el que los centros de FP no daban a basto para atender toda la demanda de mano de obra cualificada en ciertas ramas, las empresas pedían a los mejores. Ahora, confiesa Amaro, "te piden un buen trabajador, alguien que no dé problemas, alguien con motivación y, evidentemente, bien formado". Así que más allá de ser una puerta hacia un trabajo, Hezibi se presenta como "una motivación más para los alumnos" ya que son conscientes de que solo un grupo muy reducido accederá al programa.

 GIPUZKOA TIRA DEL CARRO. Según los datos del Departamento de Educación, en la actualidad 185 empresas vascas -115 de Gipuzkoa, 51 de Bizkaia y 19 de Araba- participan en un programa inspirado en la reputada FP dual alemana. "En la actualidad la mayoría de las empresas que participan en Hezibi pertenecen al sector industrial", expone Ramón Martínez de Murguía, director de Formación y Aprendizaje del Gobierno vasco, que ha ofrecido varias charlas informativas junto a Confebask con el fin de promover la participación en el tejido económico. La razón de la particular configuración de las empresas participantes se debe a que "el sector industrial es el que demanda un mayor nivel de especialización en el alumnado y esto es algo que se consigue con la formación en alternancia", afirma Martínez de Murguía.


El grueso del alumnado Hezibi -un total de 92 personas- estudia en ciclos de la familia de Fabricación Mecánica. Le siguen, con 31 estudiantes ambas especialidades, las familias de Electricidad y Electrónica y Administración y Gestión. Por último, 25 personas estudian Instalación y Mantenimiento.